Biotecnología al servicio del Runner: La ergoespirometría en la preparación de una media maratón.
Con el progreso agigantado de la tecnología en los últimos años en todos los campos de la humanidad, el deporte ha experimentado un cambio importante al reunir cada vez más datos de cada deportista para individualizar y optimizar con mayor exactitud y precisión el entrenamiento y la competencia tanto en alto rendimiento como en el deporte recreativo con el objetivo de disminuir el riesgo de lesiones o eventos mortales mientras el rendimiento mejora de una forma progresiva y adaptativa.
Claramente, el atletismo o “running” no se ha quedado atrás en esta evolución, proyectándose para traer consigo las ciencias aplicadas al deporte para alcanzar a toda la población de “runners”.
Uno de los sistemas biotecnológicos mas utilizados en el área del “running” es la prueba de ejercicio cardiopulmonar también conocida como Ergoespirometría y generalmente llamada “la prueba de esfuerzo” en el lenguaje cotidiano.
Pero realmente, ¿qué es la ergoespirometría y para que sirve?
Esta prueba, es una evaluación completa, integrada y simultánea de las respuestas del sistema pulmonar, cardiovascular, muscular y energético celular.
Se puede realizar con fines de rendimiento para proyectar un programa de entrenamiento o con fines clínicos en atletas con enfermedad cardiovascular establecida o en aquellos con síntomas que sugieran una patología cardiopulmonar.
Y, ¿qué significa lo anterior?
Las personas que estamos en las ciencias aplicadas al deporte con esta evaluación, tratamos de identificar los efectos del ejercicio en los diferentes órganos de los atletas para determinar su salud, su nivel de acondicionamiento y así planificar programas de entrenamiento para desarrollar atletas más sanos, con menores riesgos de eventos no deseables y claro está, optimizar el rendimiento según su propia adaptación.
Entonces, ¿Si se utilizan estas pruebas también en los deportistas recreativos?
La Ergoespirometría se ha convertido en un método bien aceptado para evaluar la salud y las adaptaciones de los diferentes sistemas corporales al ejercicio regular, sus aplicaciones útiles para la evaluación en la población general atlética se están popularizando cada vez más.
Ahora, las indicaciones propuestas de esta prueba en deportistas son:
- Prescripción del ejercicio con fines específicos al hallar las zonas de entrenamiento del “runner”,
- Determinación de la eficiencia metabólica al encontrar el FATMAX, el máximo consumo de grasas y carbohidratos realizados por el cuerpo en el ejercicio,
- Medición de la condición física inicial con la evaluación de la función de los sistemas del cuerpo,
- Control de las adaptaciones de los sistemas del cuerpo por el entrenamiento,
- Diagnóstico de enfermedades latentes y/o evaluación de síntomas inespecíficos,
- Evaluación de la respuesta cardiopulmonar en atletas o “runners” asintomáticos con enfermedades cardíacas
¿Cuáles son las variables que medimos?
Los atletas reconocen la ergoespirometría por la medición de su aptitud cardiorrespiratoria o VO2max; evaluando el “estado físico del runner”, encontrando a su vez la Frecuencia Cardiaca Máxima (FCmax)
Pero, no son los únicos parámetros, los umbrales ventilatorios evalúan la capacidad de respuesta del atleta a cargas submáximas determinantes para hallar las zonas de entrenamiento.
La velocidad crítica que es la intensidad máxima del ejercicio que puede ser mantenida durante un largo tiempo sin fatiga y la Velocidad Aeróbica Máxima (VAM) que es la velocidad en la cual se alcanza el VO2max.
Se determina el FATMAX, donde más se oxida (“quema”) las grasas relacionándola con la utilización de los carbohidratos por el cuerpo copara evaluar el gasto energético dentro del ejercicio y así ayudar con el proceso de los planes de nutrición y de entrenamiento desde una perspectiva metabólico-energética.
El sistema neuromuscular se evalúa de una forma funcional, al hallar la carga en potencia mecánica o los vatios, para relacionarla con el VO2max.
En el sistema respiratorio, podemos evaluar la ventilación, la forma como se respira en el ejercicio y determinar si hay un adecuado patrón respiratorio, la producción de CO2 en relación con el aire introducido (VE/VCO2), la presión parcial de CO2 al final de la espiración (PETCO2) que representa el acople de la ventilación y el “riego” sanguíneo en los pulmones.
Se puede evaluar el sistema cardiovascular gracias al electrocardiograma y la tensión arterial al máximo esfuerzo, ya que el ejercicio intenso puede desencadenar eventos cardíacos en atletas asintomáticos con enfermedad cardíaca.
Con estas variables, se puede determinar con mayor precisión, exactitud e individualización las zonas de entrenamiento disminuyendo algunos riesgos de lesiones y de eventos mortales.
En resumen, la biotecnología, en este caso la ergoespirometría, nos permite diagnosticar y luego guiar a través del entrenamiento como en la salud al “runner” para mejorar su condición física y su salud integralmente.
Basado en los artículos: Cardiopulmonary Exercise Test Parameters in Athletic Population: a Review y Cardiopulmonary Exercise Testing in Athletes: Expect the unexpected
Juan Guillermo Zúñiga F.
Médico y Cirujano
Pontificia Universidad Javeriana
Especialista en Medicina del Deporte
Universidad El Bosque
Docente de Fisiología Aplicada del Ejercicio
Medical Scientific Liaison at BTL Industries